Por qué Silicon Valley necesita historiadores y humanistas

Renuncia a tu trabajo en el campo de la tecnología y consigue un doctorado en Humanidades. Esa es la forma de avanzar en el mundo de la tecnología. Eso, al menos, es lo que el filósofo Damon Horowitz compartió con los asistentes a la Conferencia BiblioTech de la Universidad de Stanford en 2011. Horowitz es también un emprendedor y co-fundador de una compañía, Aardvark, que fue vendida a Google por 50 millones de dólares. Actualmente es el In House Philosopher y Director of Engineering de Google. Esperen, dirá usted, esto no tiene sentido. En un momento en el que un número record de personas, entre ellas quienes tienen una especialización, están recibiendo ayuda del Estado, ¿qué clase de tonto buscaría un doctorado en un campo con un futuro poco claro más allá de la educación superior y la enseñanza?

En Silicon Valley, los ingenieros y estudiantes con honores así como todos los demás están tomando clases de matemáticas. Los inversionistas suelen expresar su fastidio por los directivos que no son ingenieros. Los padres en Silicon Valley envían a sus hijos a la escuela esperando que se gradúen en ciencia, tecnología, ingeniería o matemáticas. La teoría es esta: si te gradúas en una de esas áreas, obtendrás un mejor salario y una mejor posición laboral.

El problema es que la teoría está equivocada. En 2008, mi equipo de investigación en Duke y Harvard encuestó a 652 ejecutivos nacidos en Estados Unidos y responsables del área tecnológica en 502 compañías vinculadas con tecnología. Encontramos que hay una tendencia a ser altamente instruidos: 92% tenía grados de bachillerato y 47% grados de educación superior. Pero solo el 37% tenía un título en ingeniería o computación, y solo el 2% en matemáticas. El resto tenía títulos en negocios, contabilidad, finanzas, salud, artes y humanidades.

Sin embargo, tener un título hacía una gran diferencia en los ingresos y empleo al iniciar una compañía. Pero el área de este título académico no era un factor relevante. En los dos últimos años, he entrevistado a los fundadores de más de 300 empresas en Silicon Valley. Un rasgo en común que he observado es la pasión por cambiar el mundo y la confianza en vencer las adversidades y sobreponerse a estas. Cualquier discusión de esta naturaleza debe llevarnos de vuelta a la comparación entre Steve Jobs y Bill Gates. Es cierto, Jobs era técnicamente competente. Pero tenía una educación ecléctica, en la que dedicaba igual cantidad de tiempo a la filosofía y la caligrafía como a las matemáticas y la ingeniería.

Voy a llevar esta idea más allá. Creo que los humanistas son los mejores administradores de proyectos y de productos, así como los líderes más visionarios. La razón es muy sencilla. Los especialistas en tecnología y en ingeniería se concentran en aspectos determinados, que pueden ser atractivos para geeks, pero inútiles para el resto de la gente. En el otro lado, los humanistas pueden fácilmente concentrarse en las personas y cómo estas interactúan con la tecnología. Alguien con un título en Historia y que ha estudiado la Ilustración o el surgimiento y caída del Imperio Romano está más inclinado a comprender los aspectos humanos de la tecnología y cómo la aplicación práctica y el diseño pueden marcar la diferencia entre una nota histórica a pie de página y un cambiante mundo tecnológico. Un psicólogo, por otro lado, estará más dispuesto a saber cómo motivar a las personas o entender lo que los usuarios desean.

* El artículo original fue publicado por Vivek Wadwha, Why Silicon Valley needs Humanist Students, en The Washington Post (Mayo 17, 2012).

 

Enlaces relacionados

HGoL, Visualizando la República de las Letras (noviembre 2010).

HGoL, Historiadores, mercado laboral y diversificación en Estados Unidos (abril 2012)

Créditos: La foto de la cabecera proviene del mismo artículo de Wadwha.

Published by José Ragas

Soy Ph.D. en Historia por la Universidad de California, Davis. Actualmente me desempeño como Profesor Asistente en el Instituto de Historia de la Universidad Católica de Chile. Anteriormente he sido Mellon Postdoctoral Fellow en el Departament of Science & Technology Studies en Cornell University y Lecturer en el Program in the History of Science and History of Medicine en Yale University. Correo de contacto: jose.ragas(at)uc.cl Para conocer más sobre mis investigaciones, pueden visitar mi perfil o visitar mi website personal: joseragas.com.

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